Isla Margarita, Venezuela 7 de febrero de 2014 – Efectiva labor monticular combinada de Giancarlo Alvarado, Steve Smith y Tyler Herron guiaron anoche a la Final de la Serie del Caribe a la escuadra boricua, tras derrotar a los anfitriones Navegantes de Magallanes, vía blanqueada, 2-0, en partido escenificado en el estadio Nueva Esparta de esta Isla, ante 15,722 parroquianos pagando, superando los 100,000 espectadores que han presenciado la Serie.
De esta manera los representantes de la Isla del Encanto lucharán esta noche por el campeonato de este Clásico frente a los campeones defensores, los Naranjeros del Hermosillo. El último trofeo de estas series obtenida por una delegación puertorriqueña se obtuvo en Santo Domingo en el año 2000, cuando los Cangrejeros de Santurce, entonces dirigidos por Mako Oliveras, se proclamaron campeones invictos, mientras que la última vez que calificaron para una serie final fue en el 2003 en Carolina, cuando las Águilas Cibaeñas, dirigidos por Félix Fermín, se agenciaron el cetro con marca de 6-1.
Alvarado, lanzó seis entradas completas, permitiendo un par de indiscutibles, regaló dos boletos y ponchó a igual número de adversarios. Smith (1-0), trabajó dos entradas cediendo un solo imparable, para agenciarse la victoria, mientas que Herron (S-3), cerró la última entrada ponchando a dos de los tres hombres que se enfrentó, para su tercer juego preservado. Hassan Pena, (0-1), cargó con la derrota.
Puerto Rico marcó las dos únicas carreras del juego en el octavo episodio, tras un duelo monticular de Daryl Thompson y Alvarado, Pena vino a relevar a Deolis Guerra y de inmediato dio base por bola a Kennys Vargas. Luis Montañez vino a correr por Vargas en la inicial y Miguel Abreu, también recibió pasaporte. Irving Falú se ponchó y un batazo por el jardín corto de Osvaldo Martínez que no pudo levantar el torpedero Eduardo Escobar llenó las bases. Jesús Martínez reemplazó a Pena en el montículo y Eddie Rosario conectó un bombito por encima del propio Escobar, que midió mal y cayó justo detrás de éste, permitiendo a Montañez y Abreu anotar las dos vueltas.
La efectividad de los lanzadores de los Indios, mejoró luego del partido de anoche a 2.60 colectivamente, mientras que el bateo del equipo disminuyó a .199.
